Como hijo, destacó por su respeto y cariño hacia sus padres, esforzándose constantemente para ser motivo de orgullo para ellos. En su papel como padre, demostró amor incondicional, manteniéndose siempre atento a las necesidades de sus hijos. Les inculcó la importancia de la solidaridad, el respeto, el trabajo duro y la práctica de valores.
Durante sus viajes de negocios, mantuvo comunicación constante con doña María, su esposa, compartiendo detalles de su día a día y expresando su anhelo por reunirse pronto con su amada familia.
Como ser humano, Carlos fue un líder ejemplar que guiaba a otros con sus acciones. Dedicaba tiempo tanto a sus responsabilidades cotidianas como a los diversos aspectos de su vida.
Como empresario, se destacó por su innovación, tenacidad, responsabilidad y visión a largo plazo. Su liderazgo y ejemplo se evidenciaron en y su agradecimiento y atención constante de las necesidades de sus colaboradores.
Carlos F. Novella se distinguió por su visión, reconociendo el potencial de la industria del cemento en Guatemala en pro del progreso del país. Con el tiempo, se convirtió en una figura influyente gracias a su calidad como persona.
Su legado perdura a través de la Fundación, la cual rinde homenaje a su espíritu altruista, asegurando que su impacto en la sociedad siga vivo y relevante.